NO PUEDO DORMIR
¿Será así siempre?
¡No puedo dormir!. Si esta es tu frase cuando te tumbas en la cama, puede que sí haya un problema detrás. Depende de la respuesta a las siguientes preguntas:
- ¿Ocurre todas las noches?
- ¿Llevo así mucho tiempo?
- ¿Mi cabeza se llena de ideas y pensamientos?
- ¿Me hace sufrir mucho?
- ¿Altera mi ritmo de vida?
La falta de sueño genera falta de descanso físico, falta de concentración y en muchas ocasiones irritación. Todo esto altera tu ritmo de vida y tus relaciones sociales. Puede llegar a generar ansiedad y en extremos depresión.
Conseguir dormir bien fomenta el bienestar físico, la salud emocional, y mejora tu relación con los demás.
Causas
Las causas de llegar a la frase “no puedo dormir” son muchas y variadas. Es necesario que revises cómo está tu vida últimamente:
- ¿Ha ocurrido algún suceso traumático?
- ¿Te preocupa algo de forma insistente?
- ¿Has tenido alguna pérdida?
- ¿Sientes que no eres capaz de hacer lo que tienes que hacer?
- ¿Hay mucho estrés en el trabajo?
- ¿Mi estilo de vida fomenta la falta de sueño?
Responder a estas preguntas te puede ayudar a pensar sobre aquello que puede generar el no poder dormir.
El hecho de anticipar “no me puedo dormir” antes de acostarte puede ayudar a que no seas capaz de conciliar el sueño.
¿Qué puedo hacer?

Como medidas de emergencia, para poder volver a dormir, puedes:
- Hacer uso de técnicas de relajación
- Poner en marcha técnicas de respiración
- Identificar tus pensamientos para por el día ver qué hacer con ellos
- Pensar que vas a hacer lo posible por no dormir y mantén los ojos abiertos
- Mejorar tu higiene de sueño
Todas estas estrategias te pueden ayudar, pero lo importante es identificar aquello que te preocupa para poder elaborarlo y no seguir con la preocupación.
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